Una de las cosas que más molestan a los conductores, y en especial a los que conducir es su trabajo como transportistas o camioneros, son los radares móviles. Y si ya te cazan con algo de exceso de velocidad, peor aún. Pero el karma a veces tiene estas cosas y un radar puesto a traición puede llevarse una sorpresa cuandote lo saltas, como fue este caso.

Sucedió el pasado 23 de mayo en Monegro (Cantabria): una furgoneta se salió de la carretera cuando circulaba con exceso de velocidad y se chocó contra el quitamiedos y, posteriormente contra un poste de la luz de hormigón. Con tan mala suerte que el poste fue a caer sobre un coche de la DGT que contenía un agente y un radar camuflado. Vamos, de dibujos animados: incumples las reglas, buscas escaquearte… y chocas contra la autoridad.

Al menos no hubo que lamentar heridos, ni el conductor de la furgoneta ni el agente buscador de multas sufrieron daños. Pero eso sí, seguro que al conductor de la furgoneta se le quitan durante años las ganas de ir por ahí sobrepasando la velocidad permitida…